La Hermandad de Ntra. Sra. del Rocío de Sevilla-Cerro del Águila se postró un año más en su peregrinación extraordinaria ante su Titular, la Virgen del Rocío, en esta ocasión en la Parroquia de la Asunciación de Almonte, donde se encuentra la Blanca Paloma hasta el próximo mes de mayo cuando regrese a su ermita.
La jornada comenzó a las 11.00 horas, acompañados por un viento fuerte y un cielo gris descargando agua, con la salida de la comitiva desde la Capilla del Cautivo de la localidad almonteña, una corporación a la que agradecemos el cariño con el que acogió a nuestro Simpecado y a la Hermandad.
Antes del mediodía, el amplio cortejo se encontraba ya a las puertas de la Parroquia de la Asunción, justo donde tuvo que refugiarse el Simpecado ante el fuerte aguacero con el que fue recibida la Hermandad. Nuestro Hermando Mayor, José Mª Ruiz, portó el Simpecado a la entrada en la Parroquia, acompañado por representaciones de las Hermandades de los Dolores (Cerro), Cautivo del Polígono de San Pablo, el grupo joven de Sevilla Sur, un grupo de peregrinación de Las Cabezas de San Juan y, por supuesto, la anfitriona Hermandad Matriz de Almonte.
Tras el rezo de la Salve, el Simpecado regresó a la Capilla del Cautivo, donde se le hizo 
entrega a los responsables de esta hermandad almonteña, en gratitud por la cariñosa acogida, una medalla del Cerro para que María Santísima del Rosario la luzca en su salida procesional.
La posterior convivencia se celebró en la casa-hermandad de Coria del Río, a la que también hay que agradecerle su acogida y acompañamiento durante toda la jornada. Como nota curiosa hay que destacar que el Simpecado fue colocado en la antigua carreta de la hermandad coriana que se encuentra todo el año en la aldea almonteña, dejando una imagen para la historia.