Los rocieros de todo el mundo estamos de enhorabuena. Todos los que, a través de nuestros Simpecados, veneramos a la imagen de Nuestra Señora del Rocío, Patrona de Almonte, nos beneficiaremos especialmente del Año Jubilar que ha declarado Benedicto XVI a través de la Penitenciaría Apostólica.
Como todos los años jubilares (por ejemplo, el Año Jacobeo en Santiago de Compostela cada siete años), los fieles cristianos verdaderamente arrepentidos que cumplan las condiciones acostumbradas (confesión sacramental, comunión eucarística y oración por las intenciones del Papa) que visiten a la imagen de Nuestra Señora del Rocío en su Santuario de la Aldea o la parroquia de la Asunción de Almonte gozarán de indulgencia plenaria participando en algún acto sagrado, procesión o ejercicio de piedad mariana, orando y meditando por un tiempo y concluyendo con la Oración Dominical, el Credo y las invocaciones a la Santísima Virgen María (rezo de la Salve).
Aquellos fieles que por avanzada edad, enfermedad o por otra grave causa no puedan peregrinar ante la imagen, ganarán la indulgencia plenaria detestando cualquier pecado y deseando cumplir cuanto antes alguna de las condiciones. Estos fieles impedidos ofrecerán a Dios, por intercesión de Nuestra Señora del Rocío, sus propias enfermedades y problemas, sus dolores y las incomodidades que sufren.
El Año Jubilar fue proclamado por el obispo de la diócesis onubense, Monseñor don José Vilaplana Blasco, el día 27 de mayo, en el transcurso de la Misa Pontifical de Pentecostés que cada año se celebra en el Real del Rocío. El Año Jubilar quedará abierto el día 15 de agosto del presente año para clausurarse el día 7 de septiembre de 2013, víspera de la fiesta de la Natividad de Nuestra Señora. Dentro del Año Jubilar quedarán enmarcadas las celebraciones conmemorativas del II Centenario del Voto del pueblo de Almonte en agradecimiento por la generosa intercesión de la Virgen ante el de las tropas francesas durante la Guerra de la Independencia.
El Santuario del Rocío, agregado a la Basílica de Santa María la Mayor
Siguiendo una costumbre muy antigua, el Santuario de Nuestra Señora del Rocío ha sido agregado a una de las basílicas romanas para gozar de sus mismos privilegios espirituales. De los siete templos basilicales que existen en Roma, la Penitenciaría Apostólica ha unido el Santuario a la Basílica de Santa María la Mayor, donde se conservan, entre otras, las reliquias del pesebre de Jesús y en la que está enterrado el papa Pío IX, que concedió el Dogma de la Inmaculada Concepción de Nuestra Señora.
Con las mismas condiciones que para el Año Jubilar, gozarán de indulgencia plenaria los que habiendo confesado, comulgado y orado por las intenciones del papa, participen en algún acto de culto en las siguientes solemnidades y fiestas durante el año:
1 de Enero: Solemnidad de Santa María Madre de Dios.
Domingo de Pentecostés
5 de Agosto: Fiesta titular de la Basílica de Santa María la Mayor.
15 de Agosto: Solemnidad de la Asunción de Nuestra Señora.
8 de Diciembre: Solemnidad de la Inmaculada Concepción de Nuestra Señora.
Además, cada fiel podrá elegir un día para ganar esta indulgencia, así como obtenerla cuando acuda peregrinando colectivamente. En el caso de nuestra Hermandad, podrá ganarse la indulgencia el día 4 de noviembre en la peregrinación extraordinaria que este año tendrá lugar en la parroquia de Almonte.